Sucesos de una boda

SORPRESAS DE "FINDE"

Domingo, 11 de julio de 2004: Marisa, Carlos, tito Fran y tita Onchi en Gambrinus de La Carihuela “poniéndose las botas” (había que agasajar a Marisi, que las interpretaciones de alemán e inglés la han dejado escuálida). En la mesa de al lado, ¡oh, sorpresa!, eMe con melena???... A ver, me explico, como diría Josely: la familia que almorzaba junto a nosotros debían ser familiares de Miguel Pérez; eso o él estaba allí travestido con una melena larga y lacia (de esas que yo tanto envidio, por cierto), porque aquella chica era igual, igual, igual que Miguel, la misma cara, pero con melena. Nos daba la impresión, al final, de que todos nos mirábamos y ellos, seguramente por nuestra indiscreción, sonreían, pero nadie dio el paso de preguntar (yo no me hubiera cortado, pero… ¿y el apuro que le hubiese dado a Marisa?...) Carlos dijo muy seguro que era tu hermana, eMe, pero a mi no me cuadraba la edad. En fin ¿una prima? Indaga, porque tienes una doble para cuando lo necesites…

Marisa este verano, ¡no os lo vais a creer!, está más morena que yo!!!; y a la sangría le da, si no como yo –¡eso ya es mucho!-, sí como su madre, pero con más aguante… Eso debe ser genético también. Así que estábamos “durmiendo la mona/en las tumbonas” (tremendo pareado!!) cuando vinieron los novios, perdón “los maridos” más guays de Málaga. Bueno pues estando yo, repito, en la tumbona boca-abajo, no sé si deciros por qué parte de mi anatomía dicen que me reconocieron (¡Dios mío, y sin medias reductoras…!!)”¡Vaya cachondeito/con el culito!” (Otra rima???. No, ésta no vale que es de diminutivos!!). Marta, como siempre que nos vemos en la playa, estaba saliente de guardia, y Miguel con un corte de pelo… “a la última”… Hija, sobri, si es que no debes de ejercer de peluquera después de una guardia, que un día te vas a dormir y le vas a dejar la cabeza a tu "esposo"… pues, como la traía... Pero, ¡qué bonito es el amor! El marido afirma que es que él tiene la nuca así… En fin, ¡tanto, tanto glamour antes de la boda y ahora los cortes de pelo caseros…! ¡Qué le vamos a hacer! ¡LA CRUDA REALIDAD!!!

Pero este “finde” hemos tenido todavía más sorpresas. “A ver, me explico” otra vez: A Moisés cuando recogió en su piso de Málaga, le sobraron algunas cosillas que ha guardado en nuestro apartamento. Seguramente, por no dejar en un montón todo junto en el piso tan pequeño, ha repartido y “escondido”, convenientemente y por mejor (yo no lo dudo!!), sus cosas por los rincones; de manera que toooodo el fin de semana, ¡sorpresa!, nos hemos ido encontrando “material”. Eso sí, tengo que decir que lo de buen uso lo dejó en medio del salón por si teníamos calor. Me refiero a un ventilador “último modelo” que dice el tito Fran que, cito textualmente, "ni sacado de una jerrería” (sí, eMe, una herrería montalbeña!!), más que nada por el polvo que tiene (Al tito me parece que se le han olvidado ya sus tiempos de estudiante) y parece que “al ventilador con la j de jerrería/ se le pega mas la mugre todavía” (socorro, un tercero!!!) Moi, no sé si lo habrás pensado, pero yo creo, que con un calcetín, que entraría estupendamente por las rejillas metálicas del ventilador, se limpiarían esas aspas estupendamente, y luego ya si acaso con el otro les sacas brillo… Y creía yo que lo del “mar de pelusas” y la “alfombra de polvo” eran exageraciones de mis sobris!!! Hermana, estos niños, ¿a quién le han salido con lo limpias que somos las de pueblo?