Sucesos de una boda

Un sueño vs pesadilla

¿Qué irá a escribir ésta de pesadilla el mismo día de su boda? Noooo, tanquiloooos. Tengo un montón de cosas que postear (sinónimo en web-dialect del más conocido apostillar) así que voy a empezar por el sueño que tuve el otro día...Aunque ahora me parto de risa, me desperté más agobiada que de mi peor pesadilla...
Yo estaba en casa Cruz, tranquilita, con mi coleta y mi chandal (me arreglaré algún día, mamá?) y de golpe y porrazo un señor con toda la cara del príncipe (el de Montalbán no, el de Asturias) me está tirando del brazo para que avance por una alfombra roja. ¿Mande?
En ese momento me da por mirar a mi alrededor y, ¡sorpresa!, estábamos en el Palacio Real o donde quiera que esté esta gente. Mi salón no era, os lo aseguro. Doña Letizia, clínex en mano, y con una batita de "guatiné" rosa fucsia, como sacada de una película de Fernando Esteso, me mira con muy mala cara (verde y cabreada) y me dice, con voz de ultratumba: "Mira, niña, que yo no puedo salir y nos hemos enterado que tú tenías el traje preparado" Efectivamente, ¡qué mientras me abducían (se escribe así?) de mi salón me habían colocado traje y moño! Qué tensión: la Reina, que normalmente no habla, en el sueño tampoco lo hacía, sólo gesticulaba y movía los brazos como si yo fuese una gallina para que saliera del corral mientras Felipe me seguía tirando del brazo hacia la multitud de cámaras que se dejaban entrever por las ventanas mientras insistía: "Qué con el follón que hemos montado, alguien tiene que salir ¡!