Durante mis vacaciones, que no son tan largas como las de los pedagógicos (así es como llama el tito Fran a los que se dedican a la enseñanza), he tenido bastante mono de esta Web. Y al volver, he comprobado que no ha habido ni una sola entrada durante mis tres semanas de sol y playa (...y compras ¿verdad, Marta?), ni en las sucesivas. Seguramente es normal porque este invento nació por lo que nació, pero a mi me da mucha pena de que se acabe.
El caso es que la semana pasada hemos tenido en Montalbán el álbum de fotos de la boda y esto me ha proporcionado la excusa perfecta para entrar aquí de nuevo. Además, tengo que decir que el post anterior terminaba con una aseveración imposible, al menos sentimentalmente, de mejorar [Por cierto Marta, sí que veo la sonrisa del abu y recuerdo, nítidamente, la última de ese tipo que me dedicó estando apoyado, precisamente, en el hombro de tu madre].
Bueno, a lo que íbamos: las fotos. Preciosas ¿eh? Las primeras de Marta son de vuelco-supervuelco y requetevuelco. ¡Está guapísima!. Dice ella que más guapa de lo que es; ¡y una porra!, que sale lo que se pone, chica!! Lo que pasa, Marta, es que tu eres poco dada a arreglarte, pero sinoooooo!!!. Después hay una instantánea de la que me parece que me voy a pedir una copia. Es esa tan entrañable, casi abrazadas, de las mujeres de Casa Cruz. ¡Cuánto las quiero yo, Dios mio! ¡Ay..., que me da el vuelco!!!
Hablando de vuelcos, tenemos una foto en la que el padrino está con el vuelco total de lágrimas en los ojos (de la novia llorona, ni hablemos!!) que me lleva a añadir otro tipo de vuelco a la lista. A saber:
-VUELCO-ARROPADOR, es el vuelco del superpadrino del año que lleva a su niña al altar y aunque, supongo, está convencido de que se la va a entregar al novio, parecería como que no quisiera soltarla, ¿no?.
Por otra parte, como le hice la manicura a casi todas las féminas de la familia, y las fotos están que se percibe hasta el detalle más minucioso, busqué mi trabajo por todo el álbum. ¡Bueno!, ¡qué le vamos a hacer!, creo que a la novia no se le ven bien, bien las uñas en casi ninguna foto, pero ahí está Marisi, a la que no se le escapa nada (vale!, a lo mejor lo de colocar la cola de la novia, pero eso es la excepción), enseñando no sólo su superpeinado floral sino también, perdón por la inmodestia, la súper manicura francesa que le hizo su tía. Fijaos y veréis. Muy bonita esa foto, aunque es una pena que a mi Jóse le tape un poco el micro. Claro que yo es que cada vez me parezco más a papá con los míos y echo en falta otra foto de Josely leyendo él, o, ya puestos, una de cada petición.
Marta y Miguel se tienen en muy poca estima. Pues le dije al novio (en adelante marido) lo guapo que salía en las fotos, sobre todo en una que está él solo (no entiendo yo mucho de esto, pero me parece que es después de comulgar y en otra firmando) y le dio mucha risa, como diciéndome que eso es imposible.
Me hizo muchísima gracia lo bien que se ven las zapatillas de la tita Ana en el "retrato" en que está también la abuela María. ¡Si es que está claro que los zapatos hay que trabajárselos! ¿Porque os creéis que me compré yo dos pares?. De la madrina habéis elegido una foto en la que está ella sola, que es de las de enmarcar porque está guapísima. Aunque a lo mejor ella prefiere enmarcar alguna en la que esté con los novios o las de sus niñas leyendo que están divinas. No ya divinos, sino impresionantes están los tres mosqueteros. Y Julia, ¿llamativa, verdad?... je, je, je. De si las titas de la novia salen llorando o no, no voy a hablar. Sólo diré que yo creía que había aguantado el tipo y el vuelco bastante bien.
Y digo yo hermana, ¿sale muy caro hacerse un albumcito, más reducido, para verlo una siempre que quiera?
UN BESOTE MUY FUERTE PARA TODOS